Con la entrada en vigor de la ley Wert (LOMCE) volvemos al más
de lo mismo, con nuestros políticos y sus dependencias de los grupos de poder,
llamados lobby.
Hayamos de saber todos que el cambio de libros de texto,
supone para las editoriales un beneficio anual de más de 1.500 millones de
euros, motivo más que suficiente para presionar al gobierno de turno para que
cada nuevo curso se impongan nuevos libros.